La educación superior enfrenta retos relacionados con las nuevas tecnologías y la necesidad de formación continua, según la UNESCO. Se propone una educación durante toda la vida, que va más allá de la educación básica y permanente, preparando a los alumnos para un mundo en constante cambio. La Ley General de Educación establece los contenidos, propósitos y evaluaciones necesarias para cada nivel educativo, con el fin de garantizar una formación integral y flexible acorde a las necesidades del Siglo XXI.
Se propone la necesidad de estructuras docentes universitarias flexibles, con enfoque en el aprendizaje activo del alumno y en su preparación para un mundo en constante cambio.